Sección: Chuponeo

Entérese cómo Crouch, Luis García y Kuyt rajan de Invazor como Diarra, Ronaldo y Cassano lo hacían con Capello.

Crouch: Kuyt, tú y yo, siempre, ah. Dalo por hecho. Jugará Paul Anderson, Marc Gonzales, el nieto de Tony Blair, pero tú y yo en la delantera seremos suplentes hasta el 2008. Créeme.

Kuyt: Lo que yo no entiendo es que el mismo Invazor me pidió. Estaba contento con mi llegada. Vengo, juego, y ahora ni siquiera me pone en el banquillo. Y en pleno partido grita que soy una basura. Qué se habrá creído ese Talibán con iPod.

Luis García: Invazor es un huevas, no sabe nada. El día que me haga jugar de lateral izquierdo renuncio al fútbol. Total, mi familia tiene restaurantes en Madrid, fácil que con mi liquidación pongo uno.

Crouch: Pero no podemos dejarnos vencer por ese pelucón. ¿Se dieron cuenta cómo reniega cuando pierde con el Liverpool? Y todavía reniega con esos jugadores que pone. Hay que aguantársela, esos infantes recién acaban de aprender a caminar.

Kuyt: ¿Alguien tiene alguna idea por qué Invazor tiene una fascinación por los niños?, ¿los jugadores menores de quince años?

Luis García: Obvio, carne fresca, si yo estoy seguro que Invazor tiene documentación falsa, solo así podría haber pasado la prueba de pedofilia. Crouch, tú estás feo y tienes cara de viejo, ni hablar que seas el predilecto del pelucón. Y tú, Kuyt, a ti ya te probó y no le gustaste. Igual a mí. Estamos cagados.

Crouch: Felizmente se fue ese negrito Pongolle. Dicen que era su amante, ¿será cierto? Por lo que sé, los fines de semana viaja a España y nadie sabe por qué.

Luis García: Jaja. Pongolle la debe tener larga.

Kuyt: El famoso mamalú que tanto se sospechaba en los camerinos de aquí en Liverpool. Ese negrito corría como loco, también, ah.

Crouch: Ese negro fue ladrón de chiquito. Qué colera. Es una verguenza mundial. No puede ser que Paul Anderson y ese chilenito de mierda Gonzales sean titulares con la edad que tienen.

Kuyt: No te olvides de Pennant, también imberbe, acaba de terminar el colegio.

Luis García: No quiero imaginarme esas orgías que debe hacer Invazor con esos tres muchachitos.

Crouch: Si tiene enamorado a Paul Anderson, andan juntos de aquí para allá. La vez pasada ese Anderson llegó acompañado de su mamá, quien habló con el profe Invazor un rato, creo que para felicitarlo. Anderson se puso a jugar con su carrito de navidad e Invazor no le quitó la mirada de encima. ¡Qué asco!

Kuyt: Bueno, ya va a empezar el partido... hay que ir a cambiarse.

Crouch: Pero recuerda, Kuyt, tú y yo siempre, estamos marcados, nunca más volveremos a pisar una cancha en Neverland. Somos carne ya utilizada, desvirgada, harina de otro costal, hombre de otro. Jamás veremos una pelota rodar frente a nosotros... Jamás.