Rayos K: Fowler, el favorito de Shingo

Hay jugadores que tienen algo especial con su hinchada, en la liga inglesa hay muchos ejemplos; el caso de Alan Shearer y el Newcastle es un buen ejemplo. Robbie Fowler es uno de esos casos, un jugador amado por la hinchada del Liverpool, injustamente excluido del equipo por Houllier (el responsable de la llegada de Cissé y Sinama-Pongolle a Anfield). Goleador y oportunista es responsable de muchas alegrias a los Kopites.... y es el favorito de Shingo, el creador del Winning Eleven y responsable de muchas alegrias de los miembros de esta humilde pagina. Para disipar las dudas sobre los posibles favoritismos en el diseño de los jugadores decidí hacer una breve comparativa entre algunos de los delanteros favoritos de los DT de Neverland y Robbie. Como notarán, todos - a excepcion de la vaca - son punteros, todos son delanteros potentes y goleadores, de la misma tabla se desprende que en los valores puramente fisicos, Fowler esta muy por debajo de los delanteros seleccionados, salvo en el valor de respuesta, donde se deja muy en claro el oportunismo de Fowler, ademas de estar favorecido en posicionamiento y como anotador. Es decir, Fowler no es un delantero potente, como puede ser Ronaldo o Drogba, o no es un exquisito como Henry o Rooney, no es una bala asesina como Eto'o ni siquiera es un correlón regateador como Bellamy, es mas un tipo de area, un delantero rapido, bien ubicado dispuesto a meterla cuando la tenga a tiro. Usualmente lo considero un estupendo suplente, en el winnin 9 lo usaba como reemplazo natural de Sinama-Pongolle y en el 10 (donde uso a Bellamy como punta, a Kuyt como centro y a Zenden adelantado por izquierda,casi como un puntero) es el primer recambio para cualquiera de estos tres. ¿Por qué usar al delantero favorito de Shingo como suplente? no es solo el que este poco favorecido por las cifras (se nota que el genio japonés ha sido escrupulosamente justo con la actual situacion deportiva de su ídolo) sino su desagradable tendencia a las lesiones (se lesiona mas fácil que Ronaldo en los noventa) y su poca resistencia al esfuerzo (aunque tambien es cierto que a mi me gusta exigirle mucho desempeño fisico a mis delanteros, obligandolos a bajar al area chica propia a colaborar con la defensa) y su poca velocidad en piques largos. Eso es lo que nos ha dado Konami con Fowler, un homenaje a lo que siempre fue el delantero rojo, un oportunista, un diminuto cazador de goles, un pequeño dios en retirada de retorno a la casa de la que alguna vez fue expulsado por un franchute que se llenó de aciertos y errores. Con las puntuaciones de Fowler, Shingo no solo demuestra que es un genio, sino que es un grande, lleno de un sentido ético que le impidio convertir a su idolo deportivo en un robot, para retratarlo como lo que es. Grande Shingo, Grande Robbie