BALÓN DE ORO 2006

¿Así que los que otorgan el Balón de Oro se han equivocado esta vez? Todo lo contrario, briño: no solo eres mezquino al decir que Cannavaro no merece nada, sino que además tratas de levantar la figura de briño porque mete un gol cojudo de chalaca. El Barza es un buen equipo. EL BARZA. No briño. Que dejen que él conduzca la huevadita, que haga sus pasecitos inútiles por aquí y por allá, es decir, que sean tontos útiles y que eso les funcione, pues bacán. Así y todo están bien articulados. Y nadie se queja, pero al menos hay que admitirlo. Pero otra cosa es que Dinho sea un jugador para Copa del Mundo. En el último mundial, pues... todos sabemos que no hizo ni mierda, solo dar vergüenza. Y si me sacas el mundial del 2002, calificado por todo el mundo como uno de los peores mundiales de la historia, pues entonces qué triste defensa le das a Dinho. Quizás Cannavaro no meta goles -aunque creo que es defensa ¿no? y que su labor es defender ¿no?-; quizás Carew jugó el mejor partido de su vida ese día -su propio técnico lo dijo-; es probable que le haya costado la adaptación al Real Madrid al inicio –como a cualquiera-; quizás también, ya miserablemente, le puedas increpar que viene de un equipo penalizado, aunque él haya dejado todo en la cancha sin sospechar de los malos manejos de sus dirigentes, los verdaderos culpables. Quizás puedas decir mil cosas más, pero sí es cierta una cosa: en este mundial no hubo mejor defensa que Cannavaro, una muralla impasable, un verdadero CAPITÁN que salía al frente como en aquel glorioso partido contra Alemania, para deleite de chicos y chicas. Y si crees que es injusto calificar solo por el mundial, te digo que precisamente allí está tu error: porque los clubes sirven para moldear, preparar y tonificar a los jugadores que defenderán a sus países posteriormente. Allí está el verdadero reto, la verdadera importancia. No solo basta la sonrisita dientona, videitos donde le pegas al palo treinta veces. Así que la próxima demórate un poquito antes de lanzar la primera piedra, pues Briño. Page