Mala noche

El día de ayer, a las 10.55 pm, sonó el celular. Era Combi quien me dijo que en media hora podía pasar por mi casa y jugar "un par de horitas". Acepté. Llegó a las 11:45, justo cuando estaba ya con los párpados cerrados recitándome el mantra que siempre recito antes de quedarme dormido (sobre todo después de ganarle a los cachorros): "Recuerda que eres mortal... Recuerda que eres mortal". Llegó Combi, pues, y no había dónde estacionar el auto y empezó a dar vueltas, y al final de su mini odisea (lo cuadró pésimo), a las 12:07 pm entró a Neverland y ya lo esperaba el playstation encendido y con los equipos (Chelsea vs. Bayern) dispuestos. Aunque a la hora de la aritmética los resultados son más bien parejos (dos empates, dos triunfos del Chelsea, quizá tres del Bayern), la realidad me obliga a aceptar que jugué horriblemente, con una defensa que dejaba blancos, los centros fallidos, los cabezazos blandengues (Oye Lasso, Drogba necesita un nuevo entrenamiento... ¡urgente!) y en especial los pases, malísimos, desastrozos, todas las pelotas aéreas las ganaba el Bayern, y los pases a ras del suelo caían en los chimpunes de los alemanes... si no fuera porque le quitaba la bola con la marca (lo que mejor hace el Chelsea es marcar, uds saben) jamás hubiera podido llegar al arco. En fin, un desastre que alcanzó su cúspide en el penultimo partido en que el Chelsea perdió 6-1 (hacía siglos que Combi no me goleaba, puta madre). Y aunque el último partido quedó 3-2 a favor del Chelsea (y hubiera sido más si no fuera por el conchetu de Kahn), me fui a acostar mascando el freno de la amargura y la sensación de fracaso. Como sea, hoy me desquito con los cachorros. Resbalón ¿Ustedes creen que es una espléndia chalaquita? ¡Nada que ver! Solo es la mula blanca de Gudjohnasen que vuelve a pisar la cáscara de plátano que durante la mala noche de ayer pisaron, uno a uno todos los jugadores del Chelsea incluyendo a Drogba. ¡Qué babosos!