16.7.05

Vanidad dormida

Ayer en la noche, la copa oficial Vanidad de Vanidades ("tú ya sabes cómo somos, Miguelito") fue suspendida a la mitad del campeonato por causas de fuerza mayor. La Ludópata dijo sentirse "cansada" a la una y media de la mañana, declaración que sorprendió a los otros competidores y suscitó más de una sospecha ("los jugadores de winning nunca duermen, nunca tiran", ya se sabe). Quarkcito, feliz con su muñeco gigante de Henry, lamentó amargamente que sus esperanzas de campeonar se vieran cortadas de esa manera, mientras que Krusty despertaba de su monólogo pesimista ("la literatura es una mierda carajo, voy a quemar todos mis libros") para darse cuenta de que tenía un control en las manos ("qué, fue gol?, quién ganó?, quién ha puesto a Vieri en el Manchester?) y Page se alegraba discretamente de poder olvidar sus derrotas, a pesar de Owencito (¿qué hacen tres pericotes en el área rival, pasearse entre las piernas de Stam?). Chacaloncito, como siempre, es una historia distinta. Después de recorrer las calles de Lima durante horas buscando una dirección falsa ("Quark de mierda, ahora sí te diré con concha que escribes como Clemente Palma"), terminó por darse cuenta de que no hay lugar en el mundo para un corrector de estilo con tres pasaportes falsos ("pero si yo no sé postear, quién es Tyson, quién es Ludo, quién es Page, quién soy yo") y optó por arrastrarse hasta Neverland, donde sin duda no se esperaba tener la jornada futbolística más exitosa de su carrera y quizá el mejor día de su vida. Cuando la Ludópata dijo que tenía sueño, el Chacal se dijo: "cabro de mierda, seguro es porque tuve suerte", recordando una partida nefasta entre su Roma y el Milan de la Ludópata que carece de precedentes en la historia del winning y que, naturalmente, jamás se repetirá. Bajo la mirada del pequeño DT Andreas, que acababa de despertarse dando el ejemplo a sus mayores, todos los DTs se fueron retirando: Page en su Tercel verde rumbo a Omnilife; Ludo, Chacal y Quark en el Ludomóvil rumbo a sus penthouses de Roma, Barcelona y Milán respectivamente; y Tyson a los brazos de Tracy Lords. La pregunta quedó en el aire, como una sombra pesada sobre el cielo de Neverland: ¿qué llevó a la Ludópata a cancelar el juego teniendo a Adriano en sus filas? La respuesta es Pamela Anderson, para los que no se dieron cuenta.

2 comentarios:

neverlandiano dijo...

corrección: la locura de tyson no fue furiosa, sino melancólica (con algunos toquecitos de impaciencia, desesperación, comedia).
EL LUDÓGRAFO

neverlandiano dijo...

Debo decir que jugué solo UN partido de la copa Vanidad de Vanidades, el cual solo fue visto por Page y por el DT Quark del Barcelona con Henry. En ese partido, pese a que Quarkcito estaba ganador, el Mandhester y su invitado especial Vieri arrasó por 4-0 al Barcelona. Quark lloró. En cuanto a la partida repentina de Ludo, yo creo que se debe a que tenía sueño realmente y sabía que si jugaba así, sin concentración, iba a perder sin atenuantes -ya estaba dolido con el triunfo de chacaloncito por culpa de no poner a stam- así que "mejor que digan aquí huyó que aquí quedó" y se fue corriendo en el Ludomóvil...
En cuanto a esa criatura hiperactiva llamada Andreas, debo informarles que se quedó dormido recién a las 3.30 am después de ver por tercea vez Buzz Lightyear (el orginal, no ese muñequito de plástico que tiene en la mano y menos aún ese grandote que traga sanguches del pollón y se hace llamar Page)

TYSON